Autores
Andrés Ivorra Jiménez
José Miguel García Torres
Luis Posadas Fernández
Pedro Soria Estevan
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Índice
La puesta en marcha
Fue Andrés Ivorra quien sugirió, en septiembre de 2005, abordar
la realización de Orquídeas de Almería
y exponer el trabajo en Internet. La
idea quedó aparcada debido a que
estábamos en plena faena, junto a Pedro Soria, preparando la edición digital para Almería Medio Ambiente de
los 5 cuadernillos del Atlas básico de la
flora almeriense.
En septiembre de 2006, ultimada dicha tarea, Andrés
volvió a plantear el asunto pendiente. Días más tarde nos pusimos en marcha configurando
el cuarteto realizador tras captar para la causa, por mediación de Pedro, a
Luis Posadas. Ambos estaban citados en los Agradecimientos
del libro de Pallarés: “A los amigos y farmacéuticos D. Pedro Soria y D. Luis
Posadas, compañeros en correrías por la provincia en busca de orquídeas”.
Finalmente, hago mío el sentir de Pedro y de Luis
respecto a la alta consideración que nos merece la esmerada labor fotográfica de
Andrés Ivorra.
José Miguel García
Septiembre de 2007
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Presentación
Muchos aficionados a la botánica quedamos
gratamente sorprendidos al tener en
nuestras manos el libro de Antonio Pallarés Navarro Orquídeas de Almería, publicado en 1999, con las maravillosas
ilustraciones, en blanco y negro, de Mary Anne Kunkel. Se trataba de un
instrumento útil y valioso para quien quisiera adentrarse en el conocimiento de
estas fanerógamas tan llamativas e interesantes.
La familia
Orquidáceas es una de las más numerosas, pues integra
unas 20.000 especies, la mayoría de ellas tropicales, a las que hay que añadir los
híbridos artificiales creados en viveros, con lo que se alcanzarían los 35.000 táxones
diferentes.
En
la gran mayoría de los casos las orquídeas son las flores más hermosas y
sofisticadas que podemos ver en el campo, siempre y cuando nos fijemos en
ellas, pues no son demasiado grandes ni muy abundantes (con excepciones). En
ocasiones, factores externos pueden modificar la expresión genética de sus
pigmentos (antocianos) y producir ejemplares albinos o hipocromos, en todo o en
parte.
La
mejor colección de orquídeas, viviendo en su medio natural está en el Jardín Botánico de Kew (Londres).
Al realizar Orquídeas
de Almería lo primero que tuvimos
en cuenta fue que las amplias y técnicas
descripciones ya estaban recogidas en Flora
ibérica, razón por la que nos planteamos simplificarlas y reflejar los rasgos
descriptivos más relevantes. No obstante, como los internautas tendrán ocasión
de comprobar, la mayoría de los primeros planos fotográficos aportan tanta
información visual, sobre todo respecto a forma y colorido, que haría prescindible
gran parte del texto.
Respecto a los órganos subterráneos se decidió no fotografiarlos
(por no arrancar la planta), de modo que en las fichas se refleja únicamente lo
que indica la bibliografía.
Internet posibilita que en este trabajo haya expuestas muchísimas fotografías en color (en el momento de realizar este trabajo hay unas 400). Sería
muy gravoso editar un libro tradicional con tal número de ellas.
La estructuración expositiva de Orquídeas de Almería es muy sencilla y
cada ficha, bajo el conjunto de fotografías, lleva los siguientes apartados:
descripción, floración, hábitat y distribución y observaciones. Además, se
creyó conveniente incluir unas generalidades sobre la familia y un breve
glosario para facilitar la comprensión.
Consideramos que nuestro trabajo es por ahora
incompleto, dado que durante la campaña anual muchas orquídeas no han podido
ser localizadas y fotografiadas, aunque dejamos constancia del compromiso para
completarlo.
Haríamos mal si no advirtiéramos, dado que no somos
especialistas en la materia, que
posiblemente se hayan deslizado algunos errores, por lo que agradeceremos sinceramente
cualquier comunicación al respecto.
Muchas
orquídeas, tanto las tropicales como el resto, entre un tercio y un cuarto de
las especies, según estimaciones, están en peligro de desaparición por la
destrucción de su hábitat natural, ya sea por actividades industriales,
urbanísticas, turísticas, agrarias, ganaderas, etc. Hacemos, pues, un
llamamiento a los poderes públicos, tanto a nivel nacional como autonómico y local, para
velar por la conservación del medio ambiente.
Los autores
Septiembre de 2007
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Características generales de las Orquidáceas
Las orquídeas forman parte del reino de las plantas, división
Magnoliophyta, clase Liliopsida, subclase Liliidae, orden Orchidales, familia
Orchidaceae (Orquidáceas). Esta familia integra unas 20.000 especies silvestres
conocidas, lo que la sitúa entre las más amplias de dicho reino.
Se trata de plantas herbáceas, perennes,
terrestres en las especies de nuestra flora, con rizomas o tubérculos, a veces
saprófitas. Hojas no pecioladas, simples, enteras, paralelinervias, alternas,
dísticas o dispuestas helicoidalmente, algunas veces todas basales, o reducidas
a escamas y sin color verde en las especies
saprófitas. En algunos géneros pueden tener manchas oscuras (máculas).
Cuando existen hojas basales y caulinares, éstas son de menor tamaño. Los tallos aéreos de las
orquídeas ibéricas tienen crecimiento vertical y son de tipo escapo, es decir, terminan
en la inflorescencia: espiga o racimo. Las flores, sésiles o
pediceladas, nacen en la axila de una bráctea, con frecuencia más larga que la
propia flor.
Generalmente
las flores son zigomorfas, hermafroditas, epíginas,
resupinadas y trímeras. El perianto, inserto sobre el ovario, que es ínfero, consta de 6 tépalos en dos verticilos de 3, el exterior
correspondiente al cáliz y el interior a la corola. La pieza mediana del verticilo
interno es muy característica y recibe el nombre de labelo, que presenta una amplia
diversidad de formas y colorido, a
menudo con un espolón basal y, a veces,
diferenciado en hipoquilo y epiquilo. El labelo tiene gran importancia taxonómica y es, realmente,
el pétalo superior, aunque aparece en posición inferior por una torsión de
180º de la flor sobre su propio eje. Este curioso fenómeno, que se conoce con
el nombre de resupinación (ver glosario), no ocurre en todas las especies, aunque
se da en casi todas las ibéricas.
Es frecuente que cinco
tépalos, o sólo tres de ellos, adopten una posición connivente y formen una
gálea o casco que protege al ginostemo, estructura que proviene de la soldadura en mayor o menor grado del androceo con
partes del gineceo (estilo y estigmas). Precisamente, el nombre antiguo del
orden, Gynandrae (Ginandras), alude a dicha concrescencia (lo más frecuente es
que la soldadura sea tan completa que no se distingan). Los estambres, en
número de 1-2, producen polen que se dispersa en masas llamadas polinias,
las cuales suelen tener un fino
soporte, la caudícula, cuya base se
ensancha un poco y es pegajosa, recibiendo el nombre de viscidio o retináculo,
que, en numerosas especies, se encuentra protegido por una bolsita membranosa (bursícula).
El ovario es ínfero,
tricarpelar, generalmente unilocular, y contiene numerosísimos primordios
seminales marginales. Fruto seco, capsular, con dehiscencia
fisuricida, mediante tres ranuras longitudinales no coincidentes con las líneas
de soldadura de los carpelos, quedando cerrado en la base y por arriba. Semillas
diminutas, muy numerosas (varios miles), desprovistas de endosperma,
dispersadas por el viento, precisando normalmente una asociación con hongos
para germinar.
Tamaño: 900 géneros, 20.000 especies. En Europa, unas 100 especies de 35 géneros,
principalmente Orchis y Ophrys.
Distribución: cosmopolita, más abundantes y diversificadas en los
bosques tropicales, donde muchas de ellas son epífitas; ausentes en las zonas polares y los desiertos arenosos más secos.
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Partes de la flor de las orquídeas
Híbridos
El fenómeno de hibridación, consiste en que dos individuos
de especies diferentes de orquídeas se combinan entre si dando lugar a un
individuo diferente de los dos progenitores. Este individuo puede ser ocasional
o resultar estéril. Los individuos estériles, son a su vez capaces de
incorporar sus genes a los progenitores dando lugar a otros individuos
híbridos, de ahí la gran cantidad de formas y la variabilidad que poseen las
orquídeas, dando lugar a una gran dificultad para determinar estos individuos y poderlo adscribir a una
especie determinada.
Ejemplos de esta variabilidad puede ser por ejemplo la
Ophrys fusca.
Lista
Anacamptis × dafnii nothosubsp. solanoi (A. collina x A. papilionacea subsp. expansa)
Anacamptis x subpapilionacea (A. papilionacea x A champagneuxii)
Dactylorhiza x dubreuilhii (D. elata x D. incarnata)
Ophrys x heraultii (O. speculum x O. tenthredinifera)
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Otras especies citadas en Almería
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Anacamptis laxiflora
Anacamptis laxiflora subsp. elegans
Anacamptis laxiflora subsp. palustris
Androrchis cazorlensis
Androrchis langei
Androrchis morio
Androrchis spitzelii
Dactylorhiza incarnata
Dactylorhiza insularis
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Dactylorhiza maculata
Dactylorhiza majalis
Dactylorhiza sambucina
Dactylorhiza sulphurea
Gymnadenia conopsea
Ophrys atlantica
Ophrys sphegifera
Serapias lingua
Spiranthes aestivalis
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En memoria de A. Pallarés
En
memoria de Antonio Pallarés Navarro (1929 – 2000)
La
causa de que nos tratáramos poco no estuvo en que nos conociéramos tarde, sino
en que se fue pronto. Lo conocimos en
una excursión botánica que cerraba unas conferencias sobre medio ambiente; allí
acabamos acompasando el paso de ese señor que asignaba a las plantas su nombre
latino sin dudarlo, añadiendo detalles de sus preferencias geológicas,
altitudinales, con qué otras plantas vivía… Vaya, que dijimos “hay que ir al campo más veces con él”, y,
por su parte, accedió gustoso.
De
modo que con Pallarés (hablando con él le llamábamos Antonio, claro, pero el apellido daba y sigue dando autoridad a
citas y opiniones) hicimos varias excursiones, en las que añadía o confirmaba
localidades donde viven las especies que aparecerían en sus libros sobre
Cárices y Orquídeas de Almería, y disfrutábamos de todos los lugares por donde
pasábamos.
Este
gozo de la naturaleza era muy importante para él, que se mostraba orgulloso de
haberlo transmitido a sus hijos, como explicaba frente a la Casa Rural, en el
Parque Natural Sierra María-Los Vélez, donde en Semana Santa se reunía con ellos.
Ortega
y Gasset recomendaba abordar la Historia con pasión y con estudio, y de esos
dos mimbres estaba hecho el método que Antonio Pallarés usaba en la Botánica. No era un diletante que se
divertía con las plantas, sino que el rigor era su norma. Quizás por eso
llegaba a sentir cierta irritación con los estudiantes que en las excursiones
preguntaban una y otra vez el nombre de la misma planta, sin reconocerla ni
memorizarla.
Tuvimos
la suerte de acompañarle en muchas de las excursiones que hizo para realizar el
libro de Orquídeas de Almería, compartimos con él nuestras citas de los lugares
donde las habíamos encontrado. En esas excursiones, encontramos para la Flora
de Almería varias orquídeas que no estaban citadas en nuestra provincia; en el
caso concreto de Orchis lactea var. acuminata
(en Sierra Cabrera), fue en una de
esas paradas que llamamos técnicas: allí estaba, diminuta, escondida, pero a la vez diciéndonos por fin me habéis encontrado. Fue uno de esos momentos
de alegría que embarga a los botánicos cuando vemos por primera vez una planta.
Esa misma tarde, ante la impaciencia de Antonio, nos fuimos para los Vélez a
casa de Mary Anne Kunkel a llevarle la orquídea para que la dibujara.
En
otra ocasión, en los alrededores del Cortijo del Conde, en la Sierra de los Filabres,
estábamos comprobando varias citas de la orquídea Dactylorhiza, cuando de repente, observamos una plantita diminuta
que llamó nuestra atención: se trataba, nada más y nada menos, del helecho Ophioglossum vulgatum, planta escasísima
en Andalucía y no citada para Almería. Desgraciadamente, algunos de los
gestores de medio ambiente no debieron leer el libro de Antonio, porque poco
tiempo después realizaron una actuación para plantar chopos, que se llevó por
delante más del 80% de la población, estando hoy en serio peligro de extinción.
Con
él aprendimos dónde están - y cómo son - un montón de plantas, y, además de
sentir la ausencia del amigo, nos queda la sensación de que hubiéramos podido
aprender mucho más. Pero nos quedan sus libros y el recuerdo de sus citas.
Gracias, Antonio.
Pedro
Soria y Luis Posadas
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Bibliografía
DELFORGE P., 1995. Orchids
of Britain & Europe. Harper
Collins Publishers.
PALLARÉS A., 1999.
Orquídeas de Almería. Gutenberg. Almería.
SAGREDO R., 1987. Flora de Almería. Instituto de
Estudios Almerienses. Diputación Provincial
de Almería.
SERRA L. &
PÉREZ B., 2001. Orquídeas silvestres de
la Comunidad Valenciana.
Consejería de Medio Ambiente. Generalidad Valenciana.
TUTIN T. G., et al., 1964-80. Flora Europaea. Cambridge.
VELASCO L. &
BELTRÁN P., 2004. Orquídeas de la
Serranía de Grazalema. Consejería
de Medio Ambiente. Junta de Andalucía. Sevilla.
INTERNET:
Flora Ibérica
Orquídeas Ibéricas
Universidad de Extremadura
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